Opinión / A paso firma avanza la Universidad Abierta de Recoleta

En los últimos días la Universidad Abierta de Recoleta ha obtenido logros que muestran cómo nuestro proyecto para democratizar el saber y distribuir el conocimiento se va consolidando y cómo quienes lo criticaban desde el prejuicio y la ideología van retrocediendo en sus posiciones. Cabe destacar eso sí, el tremendo apoyo académico y ciudadano, que desde casi todos los sectores concitó desde el momento mismo de su lanzamiento.

Dentro de los logros más relevantes, podemos destacar que dos de las universidades estatales más importantes de nuestro país, la Universidad de Chile y la Universidad de Santiago de Chile, se hayan sumado a este esfuerzo por producir, intercambiar y distribuir conocimientos, saberes y prácticas de forma innovadora, gratuita y participativa para estimular el surgimiento de una ciudadanía activa, crítica y sobre todo, transformadora de la realidad.

De la misma manera nos alegra el que dentro de nuestra primera convocatoria para participar como conferencistas, docentes e investigadores, hayamos recibido cerca de mil setecientas propuestas, distribuidas en cerca de mil trescientas de docencia, doscientas cincuenta y siete de extensión y ciento cincuenta y ocho de Investigación, provenientes de un claustro potencial de más de dos mil personas interesadas en compartir, voluntaria y solidariamente, sus conocimientos con la comunidad en los diecinueve establecimientos educacionales de la comuna, que luego de sus jornadas habituales funcionarán como sedes, facultades y campus universitarios.

De las propuestas recibidas, cerca de cuatrocientas cincuenta pertenecen al área de cultura, arte y humanidades; ciento treinta de ciencias y nuevas tecnologías, doscientas treinta de formación para el trabajo; cincuenta y dos de interculturalidad; ciento sesenta de salud y trescientas referidas a otras especialidades y disciplinas emergentes.

Algunas de ellas, presentadas por núcleos de investigadores de alto nivel de facultades de medicina y ciencias sociales, entre otras, de las universidades de Chile y de Santiago; músicos de trayectoria; trabajadores comunitarios y docentes con vasta experiencia en las áreas de sus propuestas, además de las cátedras de Migración, Derechos Humanos y Género de la Universidad de Chile, que ya están absolutamente confirmadas a partir de los convenios firmados.

En el área de extensión, podremos ofrecer talleres y cursos de robótica, ciencias experimentales y biotecnología; talleres de sexualidad para adultos mayores y jóvenes; cursos sobre big data; inteligencia artificial; átomos y agujeros negros; neurociencias; vanguardias artísticas latinoamericanas; teatro contemporáneo y salud pública.

Como si fuera poco, hemos recibido propuestas que nos permitirán evaluar la conformación de un área de idiomas, entre los que destacan francés, chino, coreano, inglés y árabe; además de varias propuestas específicas de cursos de español para inmigrantes.

Todo lo anterior, nos permite sentirnos completamente satisfechos, orgullosos y contentos de la forma en cómo este proyecto colectivo se abre camino y va conquistando, a una velocidad inesperada, nuevos espacios y socios estratégicos que nos permitirán sin duda acercarnos al logro de nuestros objetivos.

En pocas semanas más, tendremos los resultados de las postulaciones recibidas, a cargo de nuestro Comité Académico Superior; y llegando marzo, abriremos las inscripciones con una oferta concreta que nos permitirá seguir transformando nuestra comuna y mejorando la calidad de vida de quienes viven, estudian y trabajan en ella, y habremos dado el último paso para fundar un espacio educativo plural, innovador y multi/transdisciplinario que entiende que la producción y distribución del conocimiento son procesos sociales fundamentales para generar las capacidades comunitarias necesarias para construir una sociedad con más justicia y humanidad.

Daniel Jadue
Alcalde de Recoleta